Desde las primeras notas, Bvlgari Black sorprende con una apertura intensa y ahumada, dominada por el té negro, el bergamota y la rosa, que le otorgan un carácter intrigante y envolvente. En el corazón, emergen matices cálidos y especiados de sándalo, cedro y jazmín, aportando profundidad y equilibrio a la fragancia. Sin embargo, su sello distintivo se encuentra en la base, donde la vainilla, el ámbar, el cuero y el musgo de roble se entrelazan para crear un aroma oscuro, adictivo y con un toque industrial.
Esta fragancia se distingue por su personalidad audaz y su versatilidad, convirtiéndose en una opción ideal para quienes buscan un perfume fuera de lo convencional. Su evolución en la piel es envolvente y sensual, con una estela moderada pero de gran duración. Perfecta para ambientes nocturnos y estaciones frías, Bvlgari Black es una obra maestra olfativa que fusiona lo urbano con lo elegante, capturando la esencia de la modernidad en un aroma inolvidable.
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